lunes, 6 de junio de 2011




















Artesanías y tradiciones populares

En Lisandro de la Torre y Avenida de los Corrales, justo en el viejo mercado de hacienda de Liniers, se encuentra la Feria de Mataderos, bien cerca de nuestra cultura.


Salida gasolera si las hay. Es justo para cuando uno tiene ganas de conocer algo nuevo, pero quedan pocas monedas en el chanchito. Claro, muchos me pueden decir que hay muchas cosas lindas para comprar y puede transformarse en una salida muy costosa. Eso también es cierto. La verdad es que es un imperdible de Buenos Aires y lo que es más notorio, es que no muchos porteños la conocen. Se llega en colectivo por $ 1,25 como máximo. Y allí, a recorrer. Hay puestos que venden las cosas más originales e inesperadas. Por ejemplo, souvenirs hechos con cáscara de huevo –un arte que muy pocos manejan–; artículos en cuero, telas, juguetes, carteras, billeteras, juegos –como dominó, ajedrez, dados, hechos a mano, entre otros–. También hay artículos para el hogar, adornos, luminarias, muebles para niños, etc. El rubro gastronómico no se queda atrás: quesos artesanales saborizados con nueces, albahaca, orégano y demás especias; embutidos, dulces caseros, panes saborizados, tortas fritas, facturas, chocolates, caramelos, entre otras exquisiteces típicas de cada provincia. Es, en realidad, la feria de las provincias. Fue creada en 1986, por una iniciativa de la licenciada Sara Vinocur que es actualmente su coordinadora para difundir nuestras raíces culturales. Los turistas extranjeros que andan paseando por Buenos Aires van a encontrar en Mataderos un aspecto de la cultura argentina que no siempre se tiene en cuenta. Seamos honestos: ¿qué les decimos a los viajeros cuando llegan a la Argentina? Les hablamos del tango, de la calle Florida y de La Boca. ¿Y Mataderos? Se van a sorprender.

Espectáculos y propuestas gastronómicas. No solo se trata de recorrer puntos de venta. Una de las atracciones de la feria se centra en los espectáculos folclóricos. Todos los fines de semana se puede disfrutar de un programa diferente. Shows en vivo, bailes típicos y cantantes protagonizan los espectáculos. Pero los bailarines no son solo profesionales: muchos aficionados bailan al compás de los temas y disfrutan de un sábado –o un domingo– bien telúrico.

Otra de las visitas impostergables en Mataderos es el Museo de los Corrales, que desde 1964 ofrece a los visitantes un abanico de elementos campestres, como tijeras de tusar, boleadoras, nidos de hornero y de boyero, una carreta bendecida por el cardenal Copello llamada “La Corralera”, cuadros de Emilio Prudencio Bustos y de Andrés Bestard, entre otras cosas.

En cuanto a dónde comer, para mí ir a Mataderos y no visitar el bar Oviedo es casi un pecado mortal. Inaugurado en 1900, tiene toda la historia del barrio impregnada en las paredes, el piso, las sillas. Era el bar de los payadores y allí se reunieron los mejores de la época. Su fundador, Fernando Ghio, fue un precursor de la cultura del barrio. Y, por supuesto, en Mataderos, en medio de espectáculos folclóricos y en el bar Oviedo, hay que pedirse un buen locro, la milanesa con papas fritas déjela para otra ocasión.

También se puede comer el locro en los puestos de la calle y tomar un café en Oviedo si tenemos la billetera en rojo. Y el postre, pueden ser los típicos pastelitos de batata o de membrillo o algo un poco más light, una brochette de frutas caramelizadas. Todo se puede comprar en los puestos callejeros, además de las típicas opciones para los chicos.

Los visitantes se pueden sacar fotos con un pony llamado Muñeco y los más chiquitos pueden dar un paseo en el pony. También se pueden sacar fotos con una llama muy simpática. ¿Alguien se acuerda de la publicidad de la llama que llama? Si bien esta no se dedica a hacer bromas pesadas por teléfono, sí le gusta robar comida a los transeúntes distraídos, así que mucho cuidado con esta llama golosa.

Un paseo para reencontrarse con las raíces de nuestra tierra. Yo lo recomiendo.

Marta Gatti

¿Dónde estamos?

En Lisandro de la Torre y Avenida de los Corrales, centro neurálgico del barrio de Mataderos.

¿Cómo llegar?

En auto o en los colectivos: 117, 36, 55, 92, 63, 80, 97, 103, 126, 141, 155, 180 y 185

Datos útiles

La feria está abierta sábados y domingos hasta las 20, salvo en verano que está abierta hasta las 23. El Museo de los Corrales abre los jueves de 15 a 18 y los domingos de 13 a 19.

Informes

www.feriademataderos.com.ar

1 comentario:

  1. que bueno que esta buenos aires!! yo en unas semanas voy a hospedarme en un alquiler temporario en Recoleta espero poder conocer todo eso!!

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