viernes, 14 de enero de 2011

Recorrido por la Ciudad de Buenos Aires








Turista en mi propia ciudad

El bus del Gobierno de la Ciudad recorre los barrios con guía incluida para que los extranjeros conozcan la historia y la cultura de Buenos Aires. Un paseo diferente con todos los condimentos que ofrece la gran ciudad.

Un domingo de sol en mi ciudad. Quise ser una turista más y saber qué les cuentan a los extranjeros cuando vienen a Buenos Aires. Entonces tomé el subte que va de Congreso a Catedral y salí por Florida y Diagonal Norte. Allí estaba estacionado el bus turístico. Pagué $ 50 por ser vecina de la ciudad y porque elegí el pasaje por 24 horas. A los extranjeros y a quienes no viven en la ciudad se les cobra $ 70 por 24 horas y $ 90 por 48 horas, y no aceptan otras monedas, solo pesos.

Confieso que cuando veía pasar el ómnibus por la calle, me imaginaba arriba con los auriculares puestos y pensaba qué se escucharía... Así que no lo pensé más y subí, fui a la parte de arriba, al aire libre. Me puse los auriculares y elegí la opción español, pero vi que había 12 idiomas para elegir. No probé si funcionaban todos, pero sí algunos, como inglés, italiano y portugués.


Arranca el micro. Con los auriculares puestos, se escucha una voz femenina en español que nos cuenta por dónde estamos pasando, qué hechos históricos importantes ocurrieron en ese lugar y qué suelen hacer los habitantes de la ciudad en esa zona. Todos con mapita en mano, bajan o suben en las diferentes paradas.

El paseo, en mi caso, duró varias horas. A las 10 de la mañana tomé el micro, decidí bajar en La Boca y recorrer los comercios, los viejos conventillos, el Museo de Cera y disfrutar de los bailarines callejeros que ofrecen espectáculos express a los transeúntes. Y claro, La Boca tiene un encanto especial y es difícil dejar de recorrerla, todo parece nuevo, interesante.

Luego volví a tomar el micro en la parada correspondiente, y bajé en Puerto Madero. Recorrí el nuevo barrio, sus calles con nombres de mujer en homenaje a todas las grandes luchadoras argentinas, el Museo/Barco Corbeta Uruguay, caminé junto al río y fui a almorzar a uno de los muchos restaurantes de la zona. Otro paisaje completamente distinto, toda una paquetería.

Después de almorzar, volví a la parada del micro y seguí hasta los Rosedales y el Jardín Japonés. Allí recorrí los terrenos parquizados y pude observar las distintas especies de flora. Nuevamente el paisaje cambió y el día de sol ayudó a que el paseo fuera más que agradable. Luego tomé el micro nuevamente y completé el recorrido hasta llegar nuevamente a Florida y Diagonal. Ese día aún no se habían inaugurado las nuevas paradas del barrio de Belgrano, por lo tanto con el mismo boleto, tomé nuevamente el micro y fui hasta Plaza Italia. En esa parada se encuentra el Zoológico de Buenos Aires y el Jardín Botánico, en la vereda de enfrente está el Predio Rural de Palermo, donde todos los fines de semana hay alguna muestra.

Novedades. El 29 de diciembre, se inauguró la llegada del bus a Belgrano y se agregaron nuevas paradas: Galerías Pacífico, el estadio de Boca, el Museo Malba, el campo de polo, la esquina de Alvear y Callao, el Solar de la Abadía y el Museo Larreta, donde se están representando obras teatrales a precios promocionales que cambian todos los meses. Belgrano tiene pocos secretos para mí, ya que nací y me crié en este barrio, por eso me alegró mucho saber que el bus finalmente llega a mis pagos.

La verdad es que el paseo fue muy entretenido y resulta divertido ver la ciudad desde el piso de arriba del bus. Muchos piensan que el pasaje es caro para los argentinos, otros consideran que está en precio. Depende de las posibilidades de cada uno. Lo cierto es que es una opción más para pasear y conocer los secretos de nuestro Buenos Aires querido. Yo lo recomiendo.

Marta Gatti

Para pasarla bien

Pleno verano en el hemisferio sur. Fundamental llevar protector solar, sobre todo si estamos en la parte superior del micro. Un gorrito y zapatos cómodos completan el combo. A los porteños, les diría que otoño y primavera son las estaciones ideales para hacer el recorrido, porque ahora está demasiado lleno por los períodos vacacionales. Hay que tener en cuenta que si bien el paseo completo dura tres horas, como el pasaje dura 24 horas, la salida es de todo el día.

Recomiendo no dejar de bajar en la reserva ecológica, una caminata maravillosa en contacto con la naturaleza. Allí se puede hacer picnic y pasar unas cuantas horas.

Es preferible elegir un día de sol ya que el micro es descapotable y la lluvia complica el paseo.


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